31 de diciembre de 2014

Despidiendo un año lleno de holas y chau, de cambios, grandes momentos, muchos descubrimientos.

Descubriendo gente que tenia cerca pero no conocía realmente, descubriéndome en ellos, en mi interior.

Fue un año que se dividió en etapas, que paso a su propio ritmo y de esos que al finalizar te dejan con la sensación de haberse ido demasiado rápido aun cuando se vivió cada segundo como si durara horas.

Sin poder creer que realmente me encuentro habiendo terminado la secundaria este 31 le digo chau a 14 años adentro del mismo colegio y otros tantos con mis compañeros. Viéndome a mi misma en esos pasillos pensando en cuando empezaría a usar las carpetas en vez de los cuadernos e imaginándome grande, cuando termine… Ahora no me siento grande, ni siquiera lo suficiente como para empezar con esta etapa de nuevas decisiones y responsabilidades.

Me digo hola a mí. A la yo producto de los cambios que vienen y que pasaron. A mi misma llena de miedos y ansiedades. A mí junto a las personas que tengo cerca. A mí gracias a quienes aunque ya no estén tan cerca forman parte de quien soy. Le digo hola a este año que se viene. Brindo por los míos, por un mundo mejor y con el deseo de que todos tengan algún motivo para festejar.  

26 de diciembre de 2014

Gotas de lluvia

Ellas llegan sin permiso e inundan los rincones abandonados llenándolos de esa magia que trae la lluvia consigo, limpiando el polvo de lo antiguo y olvidado con nuevas energías y creando postales para el recuerdo.